Es la intervención mediante la cual se mantiene el desarrollo psicomotor e integral de los niños que por diversos factores presentan patologías congénitas o adquiridas generando limitaciones en sus actividades funcionales.
También se encarga de recuperar las habilidades psicomotoras del menor que se encuentren perdidas por enfermedad o accidente, o bien de potencializarlas, para lograr una correcta integración al entorno en el que se desenvuelven y reintegrarlo así a sus actividades diarias.